La muerte de un hijo no se supera nunca. Tenemos hijos para verlos crecer, amar, superarse, vivir. El sentimiento de culpa cuando uno sobrevive a un hijo es imposible de describir con palabras. La vida, otros hijos, seres queridos, nos hacen seguir adelante cuando a veces no queremos.
La muerte de Kobe Bryant y de su hija Gianna en un accidente aéreo nos recordó lo frágil que es la vida e inevitablemente nos hace pensar en Vanessa Bryant, quien acaba de perder a su hija y a su esposo.
Recopilamos cuatro pasos para lidiar con la pérdida de un hijo:
1. Ayuda profesional. La ayuda de una terapia e incluso sedantes o anti depresivos es clave para poder lidiar con la pérdida de un hijo, sobretodo en la etapa previa a la aceptación. El insomnio, la depresión y la ansiedad son resultados directos de una pérdida y es importantísimo tener un grupo de apoyo profesional para ayudar a manejar estas dolencias.
2. Comunicación abierta. Los seres queridos inmediatos deben poder expresar lo que sienten en todo momento y este es el apoyo más importante. La pérdida de Vanessa Bryant y las tres hijas que sobrevivieron a Kobe y a Gianna es inmensa y ellas son las únicas que van a entender lo que siente la otra en el proceso de aceptación. A veces tendemos a esconder la tristeza para no poner peor a otros miembros de la familia. Esto lo único que logra es que nos encerremos en nosotros mismos y los demás piensen que todos menos ellos han superado el dolor.
3. Despedir al hijo formalmente. Cualquier ritual para honrar y despedir a un hijo que ha fallecido es importante para los padres porque de alguna manera fuerza a forzar la aceptación que es tan necesaria para seguir adelante por los seres queridos que siguen vivos.
4. Honrar sus sueños. Cuando una persona fallece, sus sueños y objetivos no tienen por qué fallecer con ellos. Como padres podemos honrar sus deseos lo cual mantendrán viva su memoria y nos harán sentir conectados a su espíritu de una manera positiva.