El sistema inmune de un recién nacido está expuesto a todo tipo de infecciones y complicaciones. Lo ideal es que nadie visite a tu bebé hasta que reciba sus primeras vacunas pero por lo general, familiares y amigos carecen de ese sentido común.
Aquí las reglas de oro que debe cumplir quien se acerca a tu bebé:
1.- Consulta antes de llegar
Estás feliz por la llegada del bebé, pero la madre se encuentra en reposo después de un gran suceso y periodo de cambios físicos y emocionales.
No te dejes llevar por la emoción y pregunta que día podrían recibirte para conocer al nuevo miembro de la familia. Tampoco te compares con la madre. Si a ti te gustan las visitas no quiere decir que a ella también. Es educación y empatía básicas.
2.- No toques o beses al bebé
Los adultos podemos contaminar a un bebé con virus y gérmenes que no nos afectan pero que a ellos sí. No besar y tocar a un recién nacido que no es tuyo es el más generoso acto de amor que puedes darle en su primer mes de vida.
3.- Nadie te pidió consejos
Puede que seas una mamá experimentada y tu intención sea ayudar, pero cada persona tiene experiencias diferentes y no siempre funcionara lo mismo para todas.
Evita hacer comentarios sobre lo que debería o no hacer para cuidar o incluso criar a su bebé a no ser que te pidan tu opinión.
4.- Dales un espacio
Tanto la madre como el recién nacido están adaptándose y al principio ambos reposan al mismo tiempo. Los ruidos y el movimiento pueden ser un factor de estrés para el bebé y por lo tanto para la mamá. Procura no llamar o pedir visitar a menudo.
5.- Si estás enfermo, no visites a un recién nacido
Es sentido común, pero muchos adultos no lo captan. Cualquier virus es una amenaza grave para un recién nacido. Si padeces tos, gripe o cualquier otro padecimiento es mejor que pospongas esa visita.
6.- No visites con niños pequeños
Los niños tienden a tocarlo todo, inclusive el bebé. Evita llevar niños a tu visita a un recién nacido.
Otra recomendación es evitar el uso de fragancias o perfumes que puedan irritar el olfato del bebé e incluso intoxicarlos.